viernes, 30 de diciembre de 2011

Reflexiones desde un Tren... Volumen Especial "Fiebre y Desconexión"

NOTA: Este es el post correspondiente a ayer, 29 de Diciembre.

Un día más, escribo desde el tren, aunque hoy, y tras mi ausencia de ayer, lo hago sin conexión. ¿Por qué? Porque a mis neuronas le han parecido curioso o divertido que a mi se me olvidase el Internet Móvil en casa. Mira tu que gracia.


En cualquier caso, no sirve de nada llorar sobre agua derramada (o algo así era el refrán) así que -ya que este ordenador sin Internet solamente me sirve para escribir u oír música y no llevo los cascos- a escribir tocan.


Para los que os sorprenda mi ausencia de ayer, decir que tenia varias décimas de fiebre, y la conjuntivitis algo agravada (probablemente porque el día anterior estuve en el Archivo -OTRA VEZ-) pero que nade se alarme, ya que hoy estoy bastante mejor de lo primero, y lo segundo, a base de colirio lo tengo controlado.


En cualquier caso... hoy... ¿de que puedo hablar hoy? Francamente no lo se.


He de admitir que, releyendo mis posts antiguos, he leído uno que hablaba de que mi trabajo -el cual me gustaba bastante en un principio- empezaba a resultarme tedioso e incluso desagradable. Me he dado cuenta, pensándolo con calma que no es por el trabajo en sí, el cual en el fondo no está mal, es entretenido, y pasas las horas bastante rápido, sino por el trato deshumanizado y sin cargos de conciencia que se recibe del resto de compañeros.


¿Que he estado de baja dos años? Pues vale, ni un simple “¿Ya estás mejor?” de cortesía. ¿Me he reincorporado? Es todo lo que les importa a la mayoría. Claro está, no puedo hablar por todos, siempre hay gente amable y simpática que se preocupa, me pregunta, se preocupa y demás... pero he de admitir que las manzanas podridas tienden a estropear la cesta.


Asimismo, me frustra mucho la injusticia que viene con la deshumanización de la administración. Algunos ya sabréis que la idea era enviarme a mi a tiempo completo al Archivo. Alegué mis problemas de salud, y se descartó la idea.


Ahora bien, si la idea era que hubiese alguien a tiempo completo en el Archivo para que el trabajo fluyese mejor... ¿Por qué si no soy yo, ahora parece que ya no va a ser nadie? ¿Por qué ahora ya volvemos al “Pues nada, rotareis semanalmente”? No me parece justo.


Y claro... en las inmortales palabras de Miguel Lago “¿Y yo como me defiendo? ¡Ah! Jodase usted.”


La misma sensación que tuve al enterarme de que la petición de Comisión de Servicios y/o Traslado por Motivos de Salud (Solicitud que contra más me informo, más cuenta me doy que hice de pena) llegó a mi Comisaría y mi Inspector Jefe (jefe jefazo) no quiso hacer informe favorable. A pesar de que yo estaba de baja y sin perspectivas de incorporarme en breve ni a la larga.


“¿Y yo como me defiendo?¡Ah! Jodase usted.”


No negaré que ser parte de la administración tiene enormes (gigantes a veces) ventajas... pero también hay que tener en cuenta que muchas veces esas ventajas vienen inherentes a otras cosas, a otras putadas, que no siempre vemos a primera vista, y que hacen que te plantees si eso de ser Funcionario es realmente tan bonito como lo pintan.

Aunque supongo que con la mierda de situación laboral en este país ahora mismo, mejor me calló, asiento solemnemente aunque me cabreen y pongo mi mejor sonrisa falsa.


De momento al menos, será lo mejor.


Un abrazo a todos, desde el tren,

Alvaro

1 comentario:

  1. Ey Al! Pues sí que me preocupé, además asomé por MSN no sé a qué hora de la tarde y no te vi. Pero me alegro de que ya estés mejor.

    Yo creo que si no preguntaron es:

    a) porque ellos se cogen la baja por cualquier gilipollez, y no computan que alguien pueda estar realmente enfermo.

    b) como tú dices, se han deshumanizado.

    Pero no deshumanizarse en plan "me importa una mierda este chaval", no.. es como decía Mamá Ladilla: "No es que rechaces leerlo, es que no se te ha ocurrido". Son robots que se limitan a cumplir sus horas y poco más... y supongo que ellos empezarían "bien", de buen rollo.. pero el tiempo y ver cómo funcionan las cosas desde dentro habrá hecho mella en ellos.

    Así que, en lugar de cabrearse (aunque con razón) por no poder hacer nada contra esas injusticias, échale cara y aprovéchate lo que puedas.. que ellos lo van a hacer sin miramientos, tú por lo menos aún estás a tiempo de disfrutarlo xDDDD

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